Timoteo, hijo mío, te doy este encargo para que pelees la buena batalla con fe y buena conciencia, conforme a las palabras proféticas pronunciadas anteriormente sobre ti. Algunos, por no haber hecho caso a su conciencia, han fracasado en su fe. 

Biblia Dios habla hoy

Esta semana culminamos el semestre primavera 2023 en el Seminario Metodista Dr. Gonzalo Báez Camargo, una semana de mucho trabajo para todos, pero especialmente para los seminaristas, porque es la semana de exámenes o de trabajos finales, por lo cual se ha requerido un esfuerzo mayor mental y físico, pero sostenidos por la gracia de Dios.

El evangelista mexicano. Junio 2023


Todos los pastores que vivimos la experiencia de ser seminaristas, coincidiremos en que fue una etapa muy significativa: las experiencias ahí vividas, el compañerismo, las enseñanzas de nuestros profesores, la práctica pastoral, seguramente tenemos muchas anécdotas que recordar de esta etapa.
He tenido la bendición de vivir la experiencia de ser seminarista de 1982 a 1986, posteriormente ser Director interino (2019-2022) y Director (2018- 2023) Me permitiré compartir algunos aspectos históricos y posteriormente algunos comentarios sobre los seminaristas.
Doy gracias a Dios por su llamado al ministerio pastoral y el haberme permitido estudiar en el Seminario Metodista (Así llamado en 1982 año en que ingresé) bajo la dirección del Dr. Rafael Murillo Paniagua, a quien tengo en gran estima por su guía a lo largo de los 4 años que cursé la Licenciatura en Teología, graduando en 1986 del Seminario Dr. Gonzalo Baéz Camargo nombre con el que fue denominado a partir de 1983.

Doy gracias a Dios por los profesores que no sólo nos proporcionaros los conocimientos bíblicos, teológicos y prácticos, sino porque nos inspiraron con su vida cristiana y ministerial, algunos de ellos fueron: Dr. Ulises Hernández Bautista, el Pbro. Elías Herrera Hernández, las Misioneras Patricia Ridell, Katy Paterson, Ronna Case y el estimado Ted Wesley Jennings, el Pbro. Panucio Ruiz Flores, el Dr. Alejandro Ruiz Muñoz, el Pbro. Fidel Ramírez Sánchez, el Pbro. César Pérez Guzmán, y sin lugar a dudas alguien de gran apoyo a nuestra vida fue la Hna. Mercedes (Meche), quien nos preparaba los alimentos pero también quien nos exhortaba y aconsejaba.
Doy gracias a Dios por la vida de todos los compañeros que, a lo largo de los cuatro años en el Seminario, compartimos aulas, experiencias de fe y vida, el Seminario fue nuestro hogar, participamos de los quehaceres cotidianos, el compartir los alimentos, la vida devocional, las horas de juego y los tiempos en la biblioteca.

En esta fotografía aparecen Pedro Moreno gran amigo que ya descansa en el Señor, Delfina Fragoso, Abigail Gómez, mi compañera de generación y gran amiga María Esther Romero quien también ya descansa en Cristo, su servidor y Moisés Morales.
Gracias a Dios por todos los que compartimos está etapa de seminaristas.
Menciono algunos de los compañeros que aparecen en la fotografía: Andrés Hernández, Jocabed del Río, Moisés Morales, Roberto Arteaga, Emmanuel Vargas, Mario Quiroz, José Manuel Galicia, Elizabeth Aguilar, Jorge Huerta, Pedro Moreno, Miriam Soriano, Arturo Ochoa, David Peralta y Juan Aníbal Guzmán. Algunos no están en la fotografía, pero les recuerdo Leonides Aguilar, Cruz Hernández, Manuel Hernández, Juan Osorio, Noé Molina, Edith Landa, Rebeca García, Gabriela Serrano, Saúl Carro, Margarita Sánchez.

La segunda experiencia fue a fines de 1999, cuando siendo Superintendente del Distrito Hidalgo y las Huastecas, fui notificado por mi Obispo, que el Gabinete General ante la renuncia del Director del Seminario, había decidido que su servidor asumiera esta responsabilidad interina por el resto del cuadrienio, así el Señor me llevó a un ministerio nuevo y desconocido, pero teniendo claro mi llamado, mis votos de la ordenación y confiando en Dios, asumí la dirección del Seminario.
Este tiempo fue una grata experiencia, al ver la respuesta del Señor al enviar obreros a su mies, al suplir las necesidades del Seminario y manifestar su gracia en la vida de todos los que en ese momento servíamos en el Seminario.

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La foto Es del acto en el que se develó el cuadro del Dr. Gonzalo Báez Camargo al recibir el doctorado Honoris Causa de la Universidad de San Pablo en Tokio Japón, donada por sus hijos. En la foto de iz. a der. Invitada, Maresa Freire, Cherie White (Sub-directora Académica) Ing. Victoriano Báez, Natividad Casique, Hilenia Andrade, Rosenda Báez, Basilio Herrera (Director) Raquel Villalvazo, Caleb Díaz, enfrente Abigail Arredondo, Armando Pérez, José Zayas.
Algunos otros seminaristas de estos años son: Jair Limón, Juan Hernández, Paula Ramirez, Dalila Carbajal, Rosa Pagola, Isidro Martínez, Mirna Velásquez, Julio Eslava, Asgard Gálvez, Carlos Ramírez, Oscar Báez, Antonio Lara, Olga Cano, Juan Vega, Víctor Hugo Escoto, Agustín Altamirano. Hoy me gozo al ver a muchos de estos seminaristas sirviendo en el ministerio en las Conferencias Anuales.

La tercera experiencia en el Seminario se dio en el 2018, cuando el Pbro. David Peralta Robles, quien era parte del Consejo de Administración, me consultó para saber mi disposición de ser parte de la terna para la elección del Director del Seminario, a lo cual accedí y fui electo por la Conferencia General.
Una vez más el Señor me llevó a donde se requería de mis dones, y después de dos años difíciles por las deudas del Seminario, la transición en las áreas: académica, formativa y administrativa, se logró la estabilidad financiera, el establecimiento y desarrollo de los programas académicos, en la Licenciatura con el Pbro. Emmanuel Vargas Alavez y el SETE en línea con la Maestra Ruth Arce Rosales.
Hoy en un nuevo periodo al frente del Seminario en este tiempo postpandemia, vislumbramos nuevas metas: Crecimiento en alumnos para la Licenciatura en Teología, el Bachillerato en Teología en Línea y los Certificados en Teología, en Biblia, en Metodismo y en Evangelización y Discipulado en Línea, con el énfasis de que no son exclusivamente para ser pastores sino para el ejercicio de los diversos ministerios.
Así como también el ofrecer a partir del año lectivo 2023-2024 un título Universitario con reconocimiento de la SEP, a través de un convenio con la Universidad Madero de Puebla y por otra parte el ofrecimiento de nuestros programas a las Iglesia Metodistas en Latinoamérica, como la Iglesia Nacional Metodista Primitiva de Guatemala y la Iglesia Colombiana Metodista.

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Las fotografías corresponden al grupo de estudiantes que presentaron de manera presencial o a distancia sus exámenes finales de Homilética II. (Predicación) con su servidor y de Historia de la Iglesia IV (Protestantismo en México) con el Maestro Oswaldo Ramírez. Primera foto de izq. A der. Galilea Moreno, su servidor, Keila Serrano, (en la pantalla) Albertina de la O., Jaird Leonardo, José Antonio Flores. Segunda foto: profesor Oswaldo Ramírez, Francisco Olvera, Lizeth Varela, Alejandro Soto, Fernando Paulin. Parte de los 26 alumnos que se inscribieron este año lectivo en la Licenciatura en la CDMX.
Comparto algunas consideraciones respecto a los seminaristas metodistas.
En primer lugar, gratitud a Dios porque a lo largo de la Historia del Metodismo mexicano a habido hombres y mujeres que han respondido al llamamiento divino para servir en el ministerio cristiano y han sido (pues ya muchos descansan en el Señor esperando la resurrección gloriosa) o son fieles servidores de Cristo, quien no vino para ser servido sino para servir.
En segundo lugar, debemos tener presente que los seminaristas son hombres y mujeres que en su vivencia en su Iglesia local, conocieron de Jesucristo y le reconocieron como su Salvador y Señor, así como también experimentaron el llamado de Dios a servir en el ministerio pastoral y respondiendo a él decidieron inscribirse al Seminario para su preparación bíblico, teológica y pastoral, de esto da fe la congregación quien en Conferencia de Iglesia decide recomendar a aquel que desea ir al Seminario. Los directivos del Seminario en un diálogo con los aspirantes les ayudamos a tener claridad en su llamado. Damos gracias a Dios por todos los que, habiendo escuchado el llamado al ministerio, respondieron a Dios diciendo heme aquí envíame a mí, pero también debemos respaldarles como iglesia con nuestras ofrendas para que puedan cubrirse los costos de su preparación en el Seminario.
En tercer lugar, la experiencia en el Seminario, ayuda al joven o señorita a afirmar su vocación pastoral, el estudio bíblico – teológico y pastoral, la vida devocional personal y comunitaria, la relación con los compañeros estudiantes, profesores y directivos, la disciplina personal y comunitaria, la práctica pastoral que a partir del segundo o tercer año realizan apoyando en una congregación a un pastor o pastoreando ya una iglesia, todo esto ayuda a desarrollar el carácter necesario para el ministerio o la deficiencia en alguna o algunas de estas áreas, mostrará que alguien no es apto para el ministerio pastoral.
La designación por el Obispo de un nombramiento pastoral a los seminaristas, podrá afirmar su vocación al estar en relación directa con una congregación, al conocer el contexto de la comunidad, al ver las diversas necesidades de los hermanos y personas de la comunidad y experimentar como Jesucristo la compasión por las personas y la disposición de servirles.
Nuestros seminaristas viajan cada fin de semana a diversas ciudades o comunidades para atender su iglesia, ¿dónde comerá? o ¿Dónde dormirá?, esperamos que los hermanos de su iglesia provean a estas necesidades. Que tengan en gran estima a aquel joven o señorita, o al hermano adulto que va a servirles en nombre de Cristo.
En cuarto lugar, ser seminarista significa estar dispuesto a pelear la buena batalla con fe y buena conciencia, en la certeza de que Dios nos llamó al ministerio pastoral en la Iglesia Metodista y él nos sostendrá, proveerá y respaldará en nuestro ministerio. No estamos exentos de caer en pecado y decidir vivir en él, ni de desechar el ministerio “por algo mejor” o de estar en el ministerio, pero no ser fieles a las funciones encomendadas, por ello debemos perseverar en la fe y confianza en Dios y la búsqueda constante de su gracia divina por medio de la cual seremos fieles siervos.
La misión de Cristo sigue requiriendo que todos sus discípulos sigamos su ejemplo de servicio a favor del Evangelio y su Reino y requiere que aquellos que son llamados por Dios al ministerio pastoral respondan Heme aquí envíame a mí. La siguiente URL te permitirá ver un video sobre como discernir si estas llamado al ministerio pastoral.  https://youtu.be/BjcIo4VycTc

Por El editor